La Diócesis de Ipiales Nariño, desde un comunicado público, confirmó que el día 5 de noviembre del 2020, el padre Aníbal Marcial Belalcázar Rodríguez fue capturado bajo el cargo de presunto responsable del delito de abuso de menor.
El anuncio se realizó a través de un vídeo el día 9 de noviembre, donde afirman que estos casos deben ser abordados a través del proceso canónico de la iglesia y se respetan las competencias de la autoridad civil. También asumen que las decisiones de la autoridad civil serán acatadas para seguir cooperando con la misma en busca de la verdad. En tal sentido la iglesia junto a sus abogados deben proteger al sacerdote para realizar su propio juzgamiento y determinar si es culpable o no; el proceso canónico les permite que mientras no exista una sentencia religiosa podrán solicitar la libertad del padre capturado; una vez el proceso canónico determine su última palabra el sacerdote podrá ser finalmente sometido a la justicia ordinaria. Si el proceso canónico lo encuentra culpable el sacerdote será expulsado de la iglesia y entrará a ser juzgado como cualquier persona en el país; si el resultado canónico lo encuentra inocente podría ser liberado así la justicia ordinaria lo determine culpable. Frente al código canónico hay fuertes críticas donde en la mayoría de los casos terminan por apoyar a los victimarios para tapar los actos bochornosos de la iglesia, son demasiadas las quejas a nivel mundial donde esta ley interna termina por esconder los delitos de los padres. La Iglesia Católica, como institución religiosa y política, crea su propio derecho y actúa conforme a normas jurídicas en sus relaciones con los diversos estados del orbe, el derecho canónico es "el conjunto de leyes dadas por Dios, o por la potestad eclesiástica, por las cuales se ordena la constitución, régimen y disciplina de la Iglesia Católica". |